Comunicación. Es lo primero que aprendemos en esta vida. Lo gracioso es
que, en cuanto crecemos, nos aprendemos las palabras y empezamos a
hablar empezamos a darnos cuenta de lo difícil que es saber que decir. O
como pedir lo que realmente necesitamos.
Al finalizar el día, hay cosas de las que no puedes evitar hablar. Cosas
que no queremos oir, y cosas que decimos porque no podemos callárnoslas
más. Hay cosas que son más de lo que decimos, son lo que hacemos. Cosas
que decimos porque no nos queda otra. Cosas que nos guardamos para
nosotros mismos. Y, no siempre, pero de vez en cuando, cosas que
simplemente hablan por si mismas.